miércoles, 11 de abril de 2012

CONTRA LOS PELIGROS DE LA LITERATURA

Era un cuento sin importancia. No tenía que haber pasado de ahí. Era una de esas bromas que los escritores hacemos utilizando a nuestros parientes cuando no sabemos de qué escribir. Pero alguien lo cogió de mi la bandeja de la impresora sin mi permiso y se lo pasó a todos.
Mi padre se ha fugado con una dominicana, mi madre está internada en un psiquiátrico, mi hermano mayor se ha suicidado colgándose de una higuera, y mi hermana pequeña quiere ser monja o puta, o monja-puta.
Nada quedó como estaba. Lo peor fue lo de mi mujer: me echó de casa, me denunció por maltrato psicológico. Mientras salía por la puerta, mi hijo de cinco años no paraba de gritar: ¡Ya no te quiero!  ¡Ya no te quiero!




Relatos hiperbreves del más allá, Manolo Yagüe.

1 comentario:

  1. bien,muy ,muy muy ......estoy en casa y no tenemos higuera,ke consuelo,

    ResponderEliminar