jueves, 5 de enero de 2012

Borges: dos consejos de escritura

"Empiezo por divisar una forma, una suerte de isla remota, que será después un relato una poesía. Veo el fin y veo el principio, no lo que se haya entre los dos. Esto gradualmente me es revelado, cuando los astros o el azar son propicios. Más de una vez tengo que desandar el camino por la zona de sombra. Trato de intervenir lo menos posible en la evolución de la obra. No quiero que la tuerzan mis opiniones, que, sin duda, son baladíes. El concepto de arte comprometido es una ingenuidad, porque nadie sabe del todo lo que ejecuta. Un escritor, admitió Kipling, puede concebir una fábula, pero no penetrar su moraleja. Debe ser leal a su imaginación, y no a las meras circunstancias efímeras de una supuesta realidad."

"Al termino de tantos- y demasiados- años de ejercicio de la literatura, no profeso una estética. ¿A qué agregar a los límites naturales que nos impone el hábito los de una teoría cualquiera?"


La rosa profunda, prólogo, Jorge Luis Borges

P. S. Pero, cuidado con hacer demasiado caso a Borges.

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